Comunidades del Sur se plantan contra explotación minera en El Cachón: “¡Primero muertos!”


El Cachón, Barahona.– Organizaciones sociales, comunitarias y ambientalistas de toda la Región Enriquillo elevaron su voz el sábado para rechazar de manera categórica cualquier intento de explotación minera en la zona de El Cachón, advirtiendo que no permitirán la instalación de granceras que atenten contra sus recursos naturales y el futuro ecológico y turístico del sur profundo.

El pronunciamiento se realizó durante una asamblea regional celebrada en el icónico río Los Almendros, donde líderes comunitarios, federaciones de juntas de vecinos y defensores del medio ambiente de Barahona, Azua, Bahoruco, Pedernales e Independencia coincidieron en que una supuesta grancera, impulsada por empresarios foráneos, representa una “sentencia de muerte” para el ecosistema de la zona.

“Esto no es progreso, esto es destrucción. No vamos a permitir que nos arrebaten nuestros ríos, la agricultura, la fauna y nuestra propia vida”, expresó con firmeza Domingo Féliz, presidente de las Asociaciones Incorporadas (A.I.) de la Región Enriquillo.

Los comunitarios alertaron que la instalación minera destruiría los balnearios, comprometería los recursos hídricos y desplazaría actividades agrícolas esenciales para la subsistencia de la población. Exigieron la intervención urgente del presidente Luis Abinader y del ministro de Medio Ambiente, Paíno Henríquez.

El reconocido educador y ambientalista Matos Féliz fue tajante: “Ni empresarios ni granceras tienen cabida en El Cachón. No se puede permitir que destruyan lo que la naturaleza nos dio”.

Juan José Féliz, otro dirigente comunitario, denunció que estas operaciones pondrían en riesgo no solo a El Cachón, sino también a los ríos de Cabral y zonas cercanas. “Lo que quieren es acabar con todos los ríos del sur, y eso no se lo vamos a permitir”.

Desde Las Salinas, el presidente de la ADP, Danilo Féliz, relató los estragos que han dejado otras granceras en su comunidad: “Polvo, miseria y destrucción es lo que queda. No dejemos que se repita en El Cachón”.

Las denuncias incluyeron señalamientos sobre posibles “negocios oscuros” y lavado de activos detrás de los permisos y las inversiones en la zona. “Aquí hay testaferros y tráfico de influencias detrás de estas granceras”, advirtió Ramón Moreta, federado de juntas de vecinos.

La comunidad, representada por el profesor Nicolás Alcántara y jóvenes como Brainys, de la Liga Deportiva de El Cachón, dejó claro que la defensa del medio ambiente no es negociable: “Si hay que dar la vida por esta tierra, se da”, dijo Alcántara con tono desafiante.

La jornada cerró con un llamado a la resistencia social y a la movilización permanente. Martín “El Federado”, desde Baní, advirtió que solo con presión y lucha se logra detener este tipo de amenazas, y prometió sumar a 200 dirigentes más a la causa.

“¡El sur no se vende, se defiende!”, fue el grito unánime que retumbó en Los Almendros, con el respaldo de toda una región decidida a proteger sus ríos, su tierra y su gente.

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente