
Por: Guelmi Lester Brea Baldera
Primero, debemos conceptualizar: ¿Qué es una
candidatura independiente?
Las candidaturas independientes son aquellas conformadas por ciudadanos que se
postulan para algún cargo de elección popular sin pertenecer a un partido
político. Este mecanismo permite ejercer el derecho constitucional de ser
votado, ofreciendo una alternativa fuera de las estructuras partidarias
tradicionales.
La reciente sentencia TC/0788/24 del Tribunal
Constitucional (TC) ha abierto la puerta a la participación de candidatos
independientes en las próximas elecciones, marcando un hito en el sistema
electoral dominicano. Sin embargo, esta decisión plantea desafíos importantes:
los candidatos independientes no contarían con financiamiento público ni
estarían sujetos a la misma reglamentación que los partidos políticos, lo que
genera un vacío normativo que debe ser atendido.
La necesidad de una regulación
clara
Para garantizar que este derecho constitucional se
ejerza de manera efectiva y justa, es imprescindible modificar la legislación
electoral actual. Entre los cambios necesarios, destaca la revisión del método
D'Hondt para la asignación de escaños, así como la creación de un reglamento
específico que establezca reglas claras para las candidaturas independientes.
Esto no solo evitará conflictos con los partidos
políticos —que son pilares de nuestra democracia— sino que también asegurará
que la sociedad esté mejor representada. La regulación debe equilibrar el
derecho individual de postularse con la estabilidad del sistema político.
Propuestas para una implementación
efectiva
En mi opinión, la solución no es compleja. Propongo
las siguientes medidas:
- Plazos
específicos para la inscripción de candidaturas independientes:
Estas deben presentarse antes que las de los partidos políticos, para evitar que quienes no logren ser escogidos por un partido recurran a esta figura como un "plan B". Esto incentivará a los partidos a madurar y a fortalecer sus procesos internos de selección. - Requisitos
éticos y morales equivalentes:
Los candidatos independientes deben cumplir con los mismos estándares exigidos a los candidatos partidarios. Esto garantizará igualdad de condiciones y transparencia. - Distribución
en la boleta electoral:
- Para
presidentes, senadores y alcaldes, se podría establecer un límite de tres
a cuatro candidaturas independientes, organizadas por orden de
inscripción y cumplimiento de requisitos.
- Para
diputados y regidores, los candidatos independientes podrían agruparse en
bloques separados, sin vínculos entre ellos, y elegirse mediante mayoría
simple u otro método que permita una representación justa.
Un paso hacia una democracia más
inclusiva
Aunque la introducción de candidaturas independientes
puede parecer un reto para los partidos políticos tradicionales, representa una
oportunidad para elevar el nivel del debate político y ofrecer mejores opciones
a la ciudadanía. Esto fortalecerá la democracia al permitir que el sistema
electoral refleje de manera más fiel las aspiraciones y necesidades del pueblo.
La Junta Central Electoral enfrentará un mayor volumen
de trabajo, pero también tendrá la responsabilidad de garantizar que este
derecho se ejerza de forma ordenada y transparente. El resultado será un
sistema más inclusivo, donde las voces independientes tengan un espacio
legítimo y regulado en la arena política.
En conclusión, regular las candidaturas independientes
no solo es necesario, sino que es una oportunidad para enriquecer nuestro
sistema democrático, fortaleciendo tanto a los partidos políticos como a la
representación ciudadana.
Guelmi Lester Brea Baldera
Máster en Negocios y Relaciones Económicas Internacionales por Universidad
Autónoma de Santo Domingo (UASD), RD. Máster en Dirección Estratégica con
especialidad en Gerencia por Universidad Internacional Iberoamericana - UNINI,
Puerto Rico. Máster en Dirección Estratégica por Universidad Europea del
Atlántico (UNEATLANTICO), España. Licenciatura en Economía por Universidad
Autónoma de Santo Domingo (UASD), RC. Desde el año 2017 es profesor a nivel de
grado en asignaturas de las líneas de Introducción a la Economía, Economía
Dominicana, Economía Agrícola, Economía Industrial, Formulación y Evaluación de
Proyectos, Introducción a la Economía Internacional y Teoría de Desarrollo
Económico. Cuenta con varias publicaciones periódicos digitales y en revistas no
indexadas de industrias y economía. Ponente en talleres nacionales sobre Formulación
de Proyectos para Asociaciones sin fines de lucro. Es miembro del Colegio
Dominicano de Economistas (CODECO). Servidor publico en el Ministerio de
Industria Comercio y Mipymes desde 2018.