OPINION: EL SUEÑO DE LOS DOMINICANOS


Por: Lic. Anibal Corcino M.

Hijo del Municipio Histórico de Sanchez

A diferencia de los Estados Unidos de América, que se formó con la presencia de gran parte de la clase alta y burguesa de la Inglaterra sumergida en el poder papal y las persecuciones de los inquisidores. La cual a sabiendas de que no podían matarlos, los exiliaba dándole las nuevas tierras que no tenían ningún valor para ellos y que la formación de estos hombres y mujeres de actitud positiva, conocedores de la riqueza, conocedores del estado y educados en una filosofía de vida recta, les permitió aprovechar la oportunidad para formar el estado y la nación que ellos deseaban.

En ese sentido, crean su propios idioma (inglés), que nos es más que una adecuación del idioma (inglés) nativo, forman su propios medios de producción que luego le permiten exportar a la Inglaterra natal productos como el tabaco y otros, además forman su propio estado basado en la federación y unificación, forman su propia religión apoyada en el cristianismo y de paso su propio sistema de protocolo conductual, de ahí, que en todo se puede observar la moda americana y la moda inglesa o europea, el protocolo de mesa europeo y el protocolo de mesa americano, los vehículos americanos fuertes, de alta potencia, frente a los vehículos europeos más pequeños, económicos y versátiles.

Por otro lado, ya en la Hispaniola desde el inicio de su historia, de igual manera los colonizadores de nuestras tierras fueron los que impusieron un nuevo estilo de administración gubernamental, de justicia, de política, trato a los ciudadanos y distribución de la riqueza; Este estilo administrativo estuvo marcado por la formación de origen de quienes nos alfabetizaron en este sentido. Considerando el hecho de que la historia narra, que la formación de nuestros reformadores sociales o colonizadores no era jamás similar a la formación de los ingleses que formaron la América del Norte, sino que eran bandidos, prisioneros condenados a muerte, corsarios, convictos o delincuentes de toda índole ¿Qué podíamos esperar cómo producto final?

Precisamente lo que alrededor de nuestra historia hemos tenido, gobernantes esclavistas y asesinos que dieron fin a la raza aborigen en nuestra isla, secuestradores del estado que nos mantuvieron como pelota de pimpón de una mano a la otra, cuando no España en manos de Francia, cuando no Francia Haití y hasta los americanos. Pero qué decir cuando nos liberamos de esto, gracias al poderío de una nación mucho más joven que nosotros como lo es Estados Unidos de América, a quienes le llevamos un promedio de 250 años de formación, pero son ellos quienes nos acogen y nos toman bajo su abrigo con la invasión del 1916, enseñándonos cosas básicas que en 200 años no habíamos aprendido de nuestros anteriores formadores, como son: la organización de la tierra, el uso de letrinas y las carreteras de acceso vial.

Más, de todo lo anterior ¿Qué heredamos?  Obtuvimos gobiernos dictatoriales, líderes políticos elitistas, la corrupción por doquier, la impunidad, la herencia de un país presidencialistas que no ve más allá de sus intereses personales y conveniencia individual, la incapacidad de solución a los problemas fundamentales de la nación, cosas que otros países más jóvenes hace más de cien años han logrado resolver.

En el anterior sentido, todos los dominicanos conscientes de nuestra realidad social hemos soñados, con un país donde se combata la corrupción administrativa en el estado, con un presidente que defienda nuestras fronteras y establezca reglas claras entre ambos países, un presidente que no vea el estado como una propiedad, sino que los servicios y beneficios del estado lleguen a todos los ciudadanos sin importar su posición social.

Soñamos con un presidente cercano, que escuche y que dialogue con el pueblo, un presidente, con una visión de estado jurídico independiente, capaz de lograr condenas contra sectores que parecían intocables. Un presidente con una visión de estado más allá de la politiquería y el populismo, pero sobre todo un estado garantista de derechos con reglas claras para todos.

Este país que soñamos, quizás aun no lo tenemos del todo, pero siento yo, fuera de toda ideología política y partidaria, que vamos en camino de lograrlo, pero sobre que el sueño de un presidente con las características anteriores ya lo hemos logrado y se llama Luis Abinader. Un ciudadano, que ha sacrificado su vida personal, social, familiar y económica para servir a este país, arriesgando su propia vida y las de los suyos al arremeter como nunca contra el narcotráfico y las bandas de criminales y militares existentes en nuestro país, que ha luchado contra el sistema para lograr cambios significativos en nuestra sociedad.  

¡Hoy me pregunto! ¿Toda una vida deseando un presidente con estas características? Pero hoy, aún hay quienes por razones políticas se niegan a ver la realidad, el país está cambiando, nuestra nación está cambiando, hoy por hoy nos dirigimos a una nueva visión, tenemos un norte y eso nadie lo puede negar. Es por ello que los dominicanos y dominicanas debemos tener claro, que este 19 de mayo no se trata de partidos, sino de una decisión de nación, se trata de seguir construyendo el país que soñamos todos.  Este domingo nos toca decidir ¿Qué queremos como nación volver atrás o seguir adelante?

Leer mas: https://www.ahoranoticiasrd.com/2024/05/no-hay-tiempo-para-mas.html

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente